Desde la creación de nuestra fábrica en 2018, hemos instalado alrededor de 4.000 paneles solares, generando electricidad limpia y renovable.

En 2022, Roclayer empezó a consumir energía exclusivamente de fuentes renovables. Solo en el primer trimestre de 2023, evitamos emitir 102 toneladas de CO2 a la atmósfera, lo que equivale a plantar 5644 árboles.

Para reforzar nuestro compromiso con la sostenibilidad, también estamos invirtiendo en la renovación y conversión de nuestra flota a vehículos eléctricos.

Cada vez nos centramos más en utilizar recursos menos contaminantes y perjudiciales para el planeta, manteniendo su calidad y durabilidad. Intentamos utilizar más biomateriales y el menor número posible de productos fósiles.

Para preservar la biodiversidad, ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de utilizar papel certificado FSC, que garantiza que procede de bosques gestionados de forma responsable, con beneficios medioambientales, sociales y económicos.

Nuestro objetivo a medio y largo plazo es crear una economía 100% circular, aumentando la vida útil de los productos y garantizando su reutilización y reciclabilidad. Para ello, nos basamos en la continua innovación y evolución de nuestros productos y modelo de negocio.